Debian, instalación

Con la imagen que descargamos en Debian, pasos previos (I) grabada en un CD podemos empezar la instalación. Metemos el CD en la lector / grabador y reiniciamos el equipo.

En nuestro caso el sistema lee primero de la unidad óptica y nos muestra el menú de instalación, si no fuera así, habría que entrar en la BIOS del equipo y cambiar el orden de los dispositivos de arranque.

En el menú de instalación escogemos Graphic Install y pulsamos Intro. Por supuesto que se puede hacer de mil maneras, pero esta opción permite capturar pantallas lo que viene muy bien para esta bitácora.

Elegimos idioma: Español

Elegimos país: España

Elegimos el mapa del teclado, también español

A continuación la instalación monta el lector y pasamos a la configuración de red. El sistema nos muestra un par de opciones y elegimos eth0:

El sistema de instalación intentará conseguir una dirección IP a través de DHCP, pero nosotros no lo utilizamos en nuestro router y esperamos a que nos dé error:

Y en la siguiente pantalla elegimos configurar manualmente la red:

Ponemos la dirección IP

La máscara de red aparece automáticamente, y como coincide con la nuestra, aceptamos

Turno para el gateway o puerta de enlace (la IP de nuestro router)

los DNS, imprescindibles

el nombre del sistema (lo primero que se me ocurrió, ya pondremos algo más hacker)

y por último, el domino que no procede rellenar en este caso y se queda en blanco

La configuración de la red se ha completado y pasamos a elegir nuestro huso horario

Ahora es el turno de la parte más delicada de la instalación, el particionado del disco duro. Nosotros ya hemos realizado la mitad del trabajo en la entrada Debian, pasos previos (II), pero puede hacerse todo desde el programa de instalación. Vamos a elegir la opción manual, las otras no son en absoluto recomendables si el disco va a tener otros sistemas operativos, tiene otras particiones con datos, etc

Esta es el aspecto de nuestro disco, recordemos que ya están hechas las particiones (lógicas y con sistema de ficheros ext3 y swap).

Seleccionamos la partición 5,

y la editamos. Elegimos el tipo de sistema de ficheros y situamos el punto de montaje del directorio raíz (/). Según el propósito de cada sistema se pueden montar los distintos directorios en varias particiones o discos, pero esa aprte no la tenemos muy trabajada todavía.

Ahora es el turno de la partición de intercambio

Como podéis ver, tiene menos opciones que la partición /

Ya tenemos definidas nuestras particiones, para los curiosos la B de la partición #1 viene de Bootable (con arranque) y las F de nuestras particiones Linux vienen de Format (sí, las vamos a formatear otra vez)

El programa de instalación nos pide confirmación para realizar todas las modificaciones

Aceptamos y cuando termina de formatear los discos, se instala el sistema base lo que le lleva unos minutos. Cuando termina nos pide la clave de root, el superusuario de Linux. Con root hay que iniciar sesiones exclusivamente para realizar tareas de administración y cerrarlas en cuanto hayamos terminado. No seríamos los primeros que borran directorios enteros por estar con el usuario equivocado en el sitio equivocado.

y a continuación definimos nuestro usuario, el que debemos usar siempre. Primero nuestro nombre completo

Luego nuestro nombre de usuario, el que vamos a usar para identificarnos

y por último nuestra contraseña

Lo siguiente que nos toca es configurar el apt, el gestor de paquetes, una pequeña maravilla. Por motivos que no vienen al caso, a un servidor le gusta utilizar los servidores fineses o suecos

este mismo nos vale

y este campo va en blanco porque no usamos proxy

Nos apuntamos al popularity contest (no es obligatorio)

Y seleccionamos los programas que deseamos instalar. De momento no escogemos escritorio, sólo el grupo de programas estándar y el de específicos para portátiles. Para llenar el disco duro siempre hay tiempo.

Por último, el gestor de arranque, el GRUB, que nos permitirá elegir Debian o Windows al encender el portátil.

Y ya está.

Se descargan los programas necesarios de Internet y el sistema se reinicia. Si no escogimos instalar entorno gráfico, iniciaremos sesión en modo consola, en caso contrario tendremos una bonita pantalla de login.


Lo primero que vamos a hacer es asegurarnos de que nuestro sistema está al día, así que abrimos una consola y para utilizar temporalmente la cuenta de root tecleamos

# su -

y luego

# aptitude update

# aptitude dist-upgrade

Como hemos bajado la última versión y además estamos usando la rama estable nos dice que no hay ningún paquete por actualizar. Por el momento, hemos terminado las tareas de administración, así que cerramos la sesión root inmediatamente.

# exit